| 
  
        
            
              | 
| 
 
 
 
            
              | 
                    
                      | 
                            
                              | 
                                    
                                      | 
 
 
   
 
   
 
 No dejes de decirme lo mucho que me quieres.
 no escatimes tus besos, tus caricias y abrazos,
 déjame, al menos presentir que son tuyos los pasos,
 déjame imaginar que eres tú el que corriendo viene.
 
 Quiero contarte un cuento, ven a mis brazos.
 Hace ya muchos años pero aún lo recuerdo,
 cuando yo te llevaba en mi vientre, muy  dentro
 de mi ser que esperaba tenerte en mi regazo.
 
 Mucho tiempo ha pasado, muchos años...
 Te vi crecer, dar tus primeros pasos,
 vi dibujar con tiza, incomprensibles trazos,
 en aquella pizarra casi de tu tamaño.
 
 Un día  me di cuenta que ya no eras pequeño,
 te habías convertido en el sueño dorado
 que tiene la mujer que la vida te ha dado,
 y pasaste, de niño, a ser casi mi dueño.
 
 ¿Por qué? me preguntaba, con verdadero asombro
 ¿los hijos se convierten en padres de sus padres?
 ¿Por qué necesitamos que sean nuestros pares?
 ¿Por qué nos apoyamos seguros sobre su hombro?
 
 Es que pasó la vida, y el niño que ayer fueras
 deberá ser mi amigo, mi consuelo, mi guía.
 Por eso es que te pido que mientras tenga vida
 no me abandones hijo, quédate hasta que muera.
 
 Autora: María del Carmen Reyes -Madelca-
 Mar del Plata (Argentina)
 
 
 
   
 
 
 
  
    | 
   |  
| 
 
 
  
 
| 
  
  
    
    | Pintura Central:  Pablo Picasso
 Diseño Exclusivo para "El Refugio de la Brisa"Por: © Brisa Diseños - Copyright Enero 2002
 |  |  
 
 
 
 |  |  |  |  |  
 
 
 |  |  |